Preocupación por el Incremento de la Miopía a Nivel Global.

La miopía, una de las afecciones oculares más comunes, está alcanzando niveles alarmantes a nivel mundial. Los expertos en oftalmología advierten que esta tendencia podría convertirse en una crisis de salud pública si no se implementan medidas preventivas de manera inmediata. Según estimaciones, para el año 2050, el 50% de la población global podría sufrir de miopía, un incremento sin precedentes que plantea importantes desafíos en la atención oftalmológica y la calidad de vida de las personas.

La miopía es un defecto refractivo que dificulta la visión nítida de objetos lejanos, causado generalmente por una elongación excesiva del globo ocular. Aunque factores genéticos juegan un papel importante, el entorno y el estilo de vida moderno están exacerbando su prevalencia.

Los principales factores detrás de este incremento son:

Uso excesivo de dispositivos electrónicos: El tiempo prolongado frente a pantallas de móviles, tabletas y ordenadores somete a los ojos a un esfuerzo continuo en visión cercana, lo que favorece el desarrollo de la miopía, especialmente en edades tempranas.

Disminución de actividades al aire libre: La falta de exposición a la luz natural está estrechamente vinculada al aumento de la miopía. Estudios sugieren que la luz natural regula el crecimiento ocular, reduciendo el riesgo de elongación excesiva del globo ocular.

Hábitos visuales perjudiciales: Leer a corta distancia, estudiar sin descansos visuales adecuados y trabajar en espacios con iluminación insuficiente también contribuyen al problema.

Para abordar esta creciente epidemia, los expertos en oftalmología insisten en la necesidad de adoptar estrategias preventivas, especialmente en niños y adolescentes, quienes son los más vulnerables al desarrollo de la miopía.

1. Reducir el tiempo frente a pantallas
Limitar el uso de dispositivos electrónicos y fomentar descansos visuales es fundamental. La regla 20-20-20 es una herramienta práctica: cada 20 minutos de trabajo en visión cercana, mirar algo a 20 pies (6 metros) de distancia durante al menos 20 segundos.

2. Fomentar actividades al aire libre
Pasar al menos dos horas al día al aire libre puede disminuir significativamente el riesgo de miopía. La exposición a la luz natural ayuda a regular el crecimiento ocular en niños.

3. Revisiones oftalmológicas regulares
Detectar la miopía en sus etapas iniciales permite implementar tratamientos correctivos y preventivos más efectivos, como lentes de control de miopía o gotas de atropina.

4. Educación sobre hábitos visuales saludables
Promover el uso adecuado de la iluminación, una distancia correcta al leer o trabajar (al menos 30 cm del libro o pantalla), y la ergonomía visual en el hogar y la escuela son medidas simples pero efectivas.

Fuentes: