En un preocupante desarrollo en el campo de la microbiología, las resistencias a los antibióticos siguen en aumento, presentando un desafío crítico para la salud pública global. Esta tendencia alarmante, subrayada por la falta de nuevos fármacos efectivos a corto plazo, ha llevado a los expertos a pedir un refuerzo en las medidas de prevención y un uso más racional de los medicamentos existentes.
El problema de las resistencias a los antibióticos, profetizado por Alexander Fleming hace ocho décadas, se ha materializado en una epidemia que se extiende por todo el planeta. Actualmente, las infecciones bacterianas resistentes a los antibióticos están causando alrededor de 1,2 millones de muertes al año a nivel mundial, una cifra que podría aumentar diez veces para 2050. En España, el impacto es particularmente grave: en 2023, se registraron más de 23.300 fallecimientos debido a infecciones que no responden a los tratamientos disponibles.
Estas superbacterias, que anteriormente afectaban principalmente a pacientes inmunodeprimidos en hospitales, ahora han invadido la comunidad, con casos de tuberculosis e infecciones de transmisión sexual resistentes. Este cambio se atribuye al mal uso y abuso de los antibióticos, tanto en humanos como en animales, y se ve exacerbado por factores como el cambio climático y el incremento en el consumo de antibióticos durante la pandemia de COVID-19.
La respuesta a este desafío requiere una acción concertada y global. La estrategia «One Health» busca combatir las superbacterias tanto dentro como fuera de los entornos hospitalarios, incluyendo medidas como la reducción del uso de antibióticos en la medicina veterinaria y la racionalización de su uso en humanos. Sin embargo, aún queda un largo camino por recorrer, y los expertos enfatizan la necesidad urgente de desarrollar nuevos antibióticos, a pesar de la falta de interés económico por parte de la industria farmacéutica.
Este escenario subraya la importancia de una mayor concienciación y participación global para abordar la creciente amenaza de las resistencias a los antibióticos, una crisis que requiere de la cooperación y el compromiso de toda la sociedad.
Fuentes:
- El Pais Semanal