Lola Sánchez, gurú de la urología femenina: «Para fortalecer el suelo pélvico hay que ser constante»

El suelo pélvico está conformado por distintos músculos encargados de cerrar la cavidad abdominal en su parte inferior. Son músculos sumamente importantes, tanto para mujeres como para hombres, que es necesario fortalecer para prevenir su debilitamiento.

¿Qué es el suelo pélvico? Se refiere al conjunto de músculos, ligamentos y elementos de sujeción ubicados en la parte inferior de la cavidad abdominal.

Su función primordial es brindar el soporte necesario a los órganos de la pelvis, como la vejiga, el recto, el útero y la vagina en el caso de las mujeres.

 

¿Cuáles son las diferencias entre hombres y mujeres?

Las diferencias anatómicas hacen que la debilidad del suelo pélvico no tenga la misma repercusión ni los mismos síntomas en hombres y mujeres. Mientras que en los hombres, una debilidad del suelo pélvico suele tener poca repercusión sintomática (ocasionalmente incontinencia urinaria al hacer esfuerzos), en las mujeres puede manifestarse en múltiples problemas, desde incontinencia hasta prolapso de los órganos pélvicos.

¿Cuál es su función?

La función principal del suelo pélvico es proporcionar el sostén de los órganos pélvicos en la cavidad abdominal. También está involucrado en la continencia urinaria y fecal, y desempeña un papel fundamental en la etapa de expulsión durante el parto.

 

¿Cuáles son los riesgos si está debilitado? ¿Es más peligroso para las mujeres o igualmente para ambos sexos?

Los principales riesgos se derivan de la pérdida de las funciones que realizan estos músculos y ligamentos. Como mencionamos anteriormente, los síntomas difieren entre hombres y mujeres. No es más peligroso para las mujeres, pero generalmente provoca más síntomas en ellas.

En el caso de los hombres, la debilidad del suelo pélvico suele estar relacionada con cirugías pélvicas (principalmente prostáticas), y el síntoma fundamental es la incontinencia al realizar esfuerzos, toser o reír.

Por otro lado, las mujeres, debido a su anatomía, pueden experimentar una variedad más amplia de síntomas, desde incontinencia urinaria por esfuerzo y necesidad urgente de orinar, hasta prolapso de los órganos intraabdominales a través de la vagina (vejiga, útero o recto), e incluso incontinencia fecal o de gases.

 

¿Qué factores pueden debilitarlo?

El suelo pélvico puede debilitarse por diversas razones. Uno de ellos es el proceso natural de envejecimiento al que todos estamos expuestos.

Si a esto se suman factores externos como cirugías pélvicas (prostáticas, vesicales, ginecológicas o del colon), tos crónica, sobrepeso o partos, existen múltiples factores a lo largo de la vida que pueden afectar el tono de nuestro suelo pélvico.

 

¿Cómo se puede ejercitar?

Para mejorar el tono del suelo pélvico, es importante considerar todos los factores que contribuyen a su debilitamiento. Bajar de peso, dejar de fumar o tratar la tos crónica son buenos puntos de partida para quienes se preocupan por la salud de su suelo abdominal.

Por otro lado, el suelo pélvico puede fortalecerse de manera relativamente sencilla mediante ejercicios básicos que cualquier persona, independientemente de su condición física, puede incorporar a su rutina diaria (ya sea mientras conducen al trabajo o mientras ven su serie favorita).

Estos son los conocidos ejercicios de Kegel. La clave está en realizarlos de forma constante. Los resultados se notarán después de varias semanas de ejercicios regulares.

Además, cada vez es más fácil encontrar fisioterapeutas especializados en suelo pélvico, tanto para mujeres como para hombres, quienes pueden ayudarnos a realizar estos ejercicios de manera más eficiente, mejorando así los resultados que podemos obtener.

El biofeedback también ha demostrado ser efectivo para fortalecer el suelo pélvico. Se trata de un sistema que traduce la contracción muscular del individuo en una señal acústica, gráfica o ambas, para que el paciente pueda modificar y controlar dicha actividad muscular.

Otra opción es la gimnasia abdominal hipopresiva. Estos ejercicios consisten en una serie de técnicas posturales que reducen la presión intraabdominal, lo cual conduce a una activación refleja de la musculatura pélvica.

En este caso, es recomendable recibir un entrenamiento dirigido para realizar los ejercicios de manera correcta y obtener resultados realmente efectivos para el fortalecimiento del suelo pélvico.

 

¿A qué edad se debe comenzar a ejercitar?

 

No existe una edad específica para comenzar a ejercitar el suelo pélvico. Parece lógico pensar que la prevención es clave para evitar problemas futuros, por lo que se recomienda a cualquier persona preocupada por su suelo pélvico que incluya los ejercicios de Kegel en su rutina habitual.

En particular, es importante mencionar a aquellas personas que enfrentarán situaciones que pueden afectar la integridad de su suelo pélvico, como los hombres que se someterán a cirugías de cáncer de próstata, las mujeres embarazadas o cualquier paciente que se someterá a cirugías pélvicas.

Fuentes: